Seamos sinceros, por mucho que nos guste el interiorismo, enfrentarnos a una reforma es tan emocionante como desafiante. ¿Por qué? Porque es fácil caer en una serie de errores comunes que podrían transformar nuestro sueño en una pesadilla. En este proceso, que a menudo es tanto emocional como financiero, es crucial evitar ciertas trampas que podrían complicar tu vida y vaciar tu bolsillo.
No estamos hablando solo de una cuestión de estética, que también; sino de una reconfiguración del espacio para convertirlo en un refugio personal, un lugar donde cada rincón refleje nuestra personalidad y responda a las necesidades del día a día. Sin embargo, el camino hacia ese ideal puede estar lleno de obstáculos si no se planifica cuidadosamente.
Una de las principales recomendaciones de los expertos en diseño de interiores y arquitectura es la elaboración de un plan integral que contemple todos los aspectos del proyecto. Este plan debe abarcar desde el presupuesto hasta los detalles que tienen que ver más con el estilo, pasando por la funcionalidad y la sostenibilidad de los materiales.
Además, en la reforma de nuestra casa debemos considerar no solo lo que deseamos en el momento, sino también lo que podría ser beneficioso a largo plazo. La visión de futuro es vital, especialmente en un mercado inmobiliario que continúa evolucionando. Los estudios demuestran que las decisiones significativas tomadas durante las reformas tienen un impacto directo no solo en la comodidad y funcionalidad del hogar, sino también en su valor de mercado.
Para no vernos en este escenario, te presentamos las diez peores decisiones que puedes tomar al enfrentarte a una reforma integral. Solo queremos éxito en tu propósito.
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1. Ignorar la importancia de un presupuesto detallado
Sin un presupuesto claro, los sobrecostos pueden dispararse rápidamente. Es fundamental establecer un presupuesto detallado que incluya una reserva para imprevistos. Según diversos estudios, los proyectos que no cuentan con un presupuesto bien definido tienen un 45% más de probabilidades de sobrepasar los costes inicialmente previstos.
2. Elegir al profesional incorrecto
Contratar al diseñador o arquitecto equivocado puede ser desastroso. Es esencial verificar sus credenciales, experiencia y referencias. En Arquitectura y Diseño tenemos algunos cuantos ejemplos de buenos profesionales con los que puedes vivir el proceso de forma tranquila.
3. Subestimar el valor de lo funcional
No todo es estética. La funcionalidad debe ser una prioridad. Los espacios deben diseñarse no solo para que se vean bien, sino para que también sean prácticos. Sobre todo si tienes en mente que no será tu vivienda definitiva. ¿Vas a alquilarla o venderla en el futuro?
4. Pasar por alto el código de construcción local
No cumplir con las normativas puede resultar en multas o incluso en la necesidad de deshacer trabajos ya realizados. Familiarizarse con el código local de construcción es crucial antes de comenzar cualquier trabajo.
5. Tomar decisiones apresuradas en materiales y acabados
El tiempo es relativo. En una reforma recuerda aquello de: "Vísteme despacio que tengo prisa". Elegir materiales de baja calidad o no adecuados para el uso previsto puede afectar la durabilidad y el aspecto de tu hogar. Es vital investigar y elegir materiales que combinen calidad y estética.
6. No prestar especial atención a la iluminación
La iluminación puede elevar una vivienda o provocar el efecto totalmente contrario. Debe planificarse meticulosamente para realzar la estética de tu casa y asegurar la funcionalidad de cada espacio. Juega con distintos puntos de luz para tener distinta iluminación en función del momento del día.
7. No planificar el espacio de almacenamiento
Subestimar tus necesidades de almacenamiento puede llevar a un espacio desordenado y poco funcional. Recuerda esto: siempre vas a querer más. Incorporar soluciones inteligentes de almacenamiento desde el diseño inicial puede salvarte de muchos quebraderos de cabeza. Ya nadie tiene desván.
8. Seguir ciegamente las tendencias
Las tendencias van y vienen. Es importante que tu diseño tenga un equilibrio entre lo que se lleva en el momento y el estilo más atemporal. No queremos que se vea desactualizado en pocos años.
9. Descuidar la ventilación
Una mala ventilación puede provocar problemas de humedad y una mala calidad del aire interior. Es crucial integrar un sistema de ventilación eficiente que garantice un ambiente saludable.
10. No tener en cuenta el retorno de la inversión
Si bien personalizar tu hogar es esencial, también lo es considerar el valor de reventa. Algunas modificaciones excesivamente personalizadas pueden no incrementar el valor de tu propiedad y podrían incluso dificultar su venta en el futuro.